Hoy nos centramos en el nuevo modelo de nox ML10 Luxury Titanium L5 para 2019. En primer lugar, una sensación de trabajo bien hecho es la que nos invade al coger esta pala. Tanto sus acabados, pintura, diseño y vinilos, dan una sensación de pala premium sin ni siquiera haber entrado en pista.
Se que a todos nos pasa, nos vemos sorprendidos por la estética de una pala y nos ciega, espero sacar en este análisis la verdadera esencia de la pala.
La ML10 Luxury Titanium L5 es una de esas palas, que en cuanto empiezas a pelotear, te das cuenta de que vas a tener que concentrarte y controlar tus golpes. Ya desde los primeros golpeos, se empieza a notar que es una pala con un punto dulce pequeño, centrado y alto, así que has de estar muy concentrado para golpear a la bola en el sitio correcto.
Claramente, no es una pala para un derecha, estamos jugando con casi 390 grs. entre pala y overs. Responder 5-6 bandejas alternando globos y planos, es un trabajo que no está a la altura de cualquier brazo.
Tampoco podemos ser los jugones de turno desde atrás, salvo que tengas un auténtico caramelo, olvídate de poner bolas en la malla, o jugarte a cara o cruz un paralelo, esta pala no se ha diseñado para eso.
Ahora bien, todo esto que estamos diciendo, pala cabezona, pesada, con salida de bola, ¿Qué podría fallar en una bajada de pared? La respuesta es clara, NADA. Si quieres hacer la bola correr, aprieta todo lo que quieras, porque desde luego, es un auténtico cañón. Ahora bien, aprieta si tienes la posición y la bola en donde deben de estar, el problema lo vas a encontrar, cuando no golpees en el punto dulce, todas las bondades de la pala desaparecen.
Como hemos dicho anteriormente, no es una pala para un derecha, pero es un buen arma para un revés y para finalizar puntos.
Como contrapartida a esto, tienes que tener muy claro cuándo hacer una transición y subir a la red, esta pala no te va a poner las cosas fáciles. No es ágil, no es ligera y no tiene un gran punto dulce, así que jugador de revés, no te pongas en una situación en la que no vas a poder combatir.
Harina de otro costal es la volea, si eres capaz de transmitir a la bola toda tu potencia, con esta pala no vas a tener problema para acabar los puntos. Vas a poner bolas rápidas y tensas exáctamente donde quieres.
Las sensaciones en la bandeja siguen la misma senda. Si quieres hacer correr la bola, lo vas a conseguir, si quieres meter spin y atacar por fuera a la bola para hacer víbora, vas a notar un buen golpe, aunque quizás podría mejorarse si NOX hubiera diseñado una pala con algún tipo de rugosidad.
Es, claramente, el sino de esta pala, pegar. Si eres un jugador que le gusta, por encima del resto de golpes, el remate, vas a disfrutar. La pala va a trabajar, va a empujar la bola, y con el diseño del marco, su balance y peso, si tu aprietas la bola, va a ser un auténtico misil.
Si te gusta sacarla por tres, también vas a disfrutar, el balance alto hace que generar el top spin sea bastante cómodo.
Estamos ante una pala para un jugador de revés, es innegable. Pero quizás no todos estén cómodos con esta pala. Atrás escupe demasiado la bola, en comparación con la L4, han hecho una pala menos controlable en el aspecto general del juego.
La relación calidad/precio es adecuada, aunque en el rango de precio de 200€, sea posible encontrar otras palas, algo más equilibradas sin sacrificar potencia en el remate, pero aportando algo más en defensa.
En definitiva, NOX ha querido apretar el diseño y quizás le juegue una mala pasada, no todos los jugadores van a poder ganar con esta pala.
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